HARTMANICE/PRÁŠILI - El Presidente Petr Pavel ha rendido hoy homenaje a la memoria de los soldados estadounidenses muertos durante los últimos días de la Segunda Guerra Mundial en Šumava. En su discurso, ha subrayado la necesidad de hacer todo lo posible para poner fin a la guerra en Ucrania y evitar que cualquier conflicto llegue a la República Checa. El acto conmemorativo tuvo lugar en dos pueblos desaparecidos de la región fronteriza: en Zhůří y en el antiguo asentamiento de Gruberg. Ambos lugares están asociados a los combates entre las tropas estadounidenses y alemanas al final de la guerra, concretamente los días 5 y 6 de mayo de 1945.
En Zhůří, el presidente Pavel depositó una corona de flores en el monumento conmemorativo, que lleva allí 25 años. Conmemora la batalla del 5 de mayo de 1945, en la que murieron diez soldados estadounidenses de la 90ª División de Infantería. Desde allí, el Presidente recorrió 12 kilómetros en moto hasta la zona de Prášil, donde inauguró un nuevo monumento conmemorativo en el antiguo asentamiento de Gruberg. Conmemora los sucesos del 6 de mayo, cuando tuvo lugar un enfrentamiento armado entre soldados estadounidenses y cadetes alemanes. Durante la batalla murieron 21 combatientes alemanes y seis estadounidenses resultaron heridos.
El Presidente Pavel elogió el valor de los soldados que participaron en la liberación de Checoslovaquia y pidió que se preservara la memoria de las víctimas de la guerra. Al mismo tiempo, subrayó la importancia de las medidas preventivas para mantener la paz en la Europa contemporánea. Al acto conmemorativo asistieron público, historiadores, representantes militares y de las autoridades locales. En el remoto paisaje de Šumava se revivió la memoria de los héroes que dieron su vida por la libertad de los demás.
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